El interface IEEE 488 (y sus versiones IEEE 488.1 y 488.2) fué diseñado para conectar y controlar instrumentos programables, y para proveer de un interface estándar para comunicación entre instrumentos de diferentes fabricantes. Hewlett-Packard desarrolló originalmente esta tecnología y la llamo HP-IB. El interface rápidamente ganó popularidad en el sector debido a su versatilidad, y fué precisamente por esto que el comité IEEE lo adoptó y renombró como GPIB (General Purpose Interface Bus). La gran ventaja de este interface es que permite la comunicación entre diferentes equipos sin que sea necesario saber exáctamente nada sobre ellos ni sobre el formato de datos que utilizan.